El pequeño comercio supone una pieza muy importante para el desarrollo económico de una zona. Es parte de nuestra responsabilidad contribuir a su supervivencia, ya que con ello estarás ayudando a generar riqueza y empleo en tu barrio.
A continuación, te contaremos por qué es tan importante apoyar al comercio local.
Durante el confinamiento muchas tiendas de barrio tuvieron que bajar sus persianas. Sin embargo, después del confinamiento, el 10% de los comercios que bajaron la persiana durante ese periodo no han vuelto a abrir.
Los pequeños comercios son el tejido productivo más vulnerable en cualquier crisis. Solo hay que ver los datos tras la pandemia.
Según datos del índice de comercio minorista, las grandes cadenas recuperaron el nivel de ventas previo a la COVID-19. Por el contrario, la situación de las pequeñas cadenas sigue con un nivel de actividad 13% por debajo del promedio de 2019.
Los pequeños comercios como experimentan mayor caída de ventas, son lo que necesitan más liquidez, por lo que suelen caen en la insolvencia. Además, tienen mayor dificultad para acceder a líneas de crédito y financiación.
El 74% de las empresas en España tienen menos de seis trabajadores, por lo que podemos decir que la mayoría de empresas en España son pequeñas. Asimismo, son las tiendas, bares y pequeños negocios de barrio los que más trabajadores contratan.
Es sorprendente que, aunque sean las que más empleo generan, son las que más sufren la crisis al no poder competir en igualdad de condiciones con las grandes superficies.
Igualmente, los pequeños comercios suponen una parte fundamental en la vida de los barrios por varios motivos:
Comprar en los comercios de barrio no solo aporta beneficios a la economía local de la zona, sino que también tiene beneficios para el comprador:
Es más fácil conocer la procedencia de los productos que compras. Los comerciantes locales se nutren de productos de la zona, por lo que también estarás contribuyendo a mejorar la economía local.
Puedes ahorrar tiempo y dinero en desplazamientos, ya que son tiendas de proximidad en las que puedes acudir a pie sin tener que utilizar transporte público o coche que, además, es más contaminante.
Las personas que trabajan en una pequeña tienda de barrio son especialistas en los productos que venden, por lo que no tendrán problemas en aconsejarte para que tu compra sea satisfactoria.
Como hemos dicho anteriormente, los pequeños comercios no pueden competir en igualdad de condiciones con los grandes supermercados.
Se suele decir que todo es más caro en las tiendas pequeñas o que en las grandes superficies puedes encontrar más productos. Pero si te paras a pensarlo, los productos que venden las tiendas de barrio son un poco más caros porque son de mayor calidad, además el trato personalizado del vendedor suma un valor añadido importante.
Sabemos que los grandes supermercados tienen una situación bastante ventajosa frente a las tiendas de barrio. Sin embargo, podemos encontrar algunas diferencias que te harán replantearte donde terminar comprando:
Sabemos que el dinero gastado en el comercio de proximidad circula en el barrio mejorando así su economía local. En cambio, gran parte del dinero que gastas en las grandes superficies sale de la región de inmediato.
Se calcula que los productos que venden en los grandes supermercados recorren una media de 3000 kilómetros hasta llegar a las estanterías del supermercado. Sin embargo, los pequeños comercios contienen productos locales, cultivado y fabricados en la zona.
Los productos kilométricos producen un impacto medioambiental negativo que se puede reducir incentivando a comprar producto local.
Si en tu barrio no encuentras el producto que necesitas, puedes pedírselo al vendedor. Es mucho más probables que la propietaria del comercio local responda a tus peticiones que el gerente de un gran supermercado.
Asimismo, después de saber estas diferencias y teniendo en cuenta que las tiendas de barrio generan empleo, impulsan el crecimiento económico y mejora la imagen de tu zona, ¿Dónde prefieres comprar?
Teniendo en cuenta que el comercio local es un recurso económico valioso en la vida de un barrio y que además son los que tienen más complicaciones para sobrevivir a largo plazo, debemos aportar nuestro granito de arena para ayudarles, sobre todo a las tiendas que se ubican en los barrios más desfavorecidos.
Los barrios marginales no tienen ningún recurso económico valioso para incentivar su economía, excepto sus tiendas de alrededores. Para que un barrio se enriquezca tenemos que mejorar su economía y aumentar la circulación de dinero en la zona.
Comunitaria ha creado una moneda social que beneficia al comercio local de las zonas más pobres y que además ayuda a que las personas más vulnerables puedan comprar en los comercios de su zona. Esto supone una ventaja para ambos colectivos.
¿Quieres saber cómo funciona Comunitaria?
Nuestra moneda social es una moneda digital que circula en el barrio a través de las donaciones que Caritas hace a las personas en situación de pobreza extrema.
Estas donaciones se utilizan para hacer pre-compras de productos frescos en las tiendas de barrio para que después se repartan cheques digitales que son canjeables en esas tiendas.
Por lo cual, el dinero de las donaciones entra y circula en el barrio beneficiando a su economía local.
¿Quieres saber más sobre monedas sociales?